El diseño de un libro está determinado por muchos factores como el tamaño del papel que se manejan en las diferentes regiones o países, o el tipo de mensaje que se pretende publicar.
La impresión de libros se ha hecho hasta ahora en un tipo de papel llamado “bobina”. El proceso implica el manejo de pliegos organizados a base del número de páginas, tamaño de la hoja y ancho de la bobina. Los pliegos se nombran por la cantidad de dobleces que estos representan, ya sea pliegos de 16 ó 32 páginas.
Antes de la impresión, se requiere saber cuál es el tipo de doblado que se ha de realizar, a fin de calcular con precisión el número de páginas y limitar los costes tanto de papel como de plegados y cortes.
Los doblados se dividen en dos tipos: regulares e irregulares.
DOBLADOS IRREGULARES:
- Tríptico: 2 dobleces 6 páginas
- Seisavo: 3 dobleces 12 páginas
DOBLADOS REGULARES:
- folio 1 doblez 4 páginas
- cuarto 2 dobleces 8 páginas
- octavo 3 dobleces 16 páginas
- dieciseisavo 4 dobleces 32 páginas
- treintaidosavo 5 dobleces 64 páginas
Algunos ejemplos de formas de doblado:
